EN EL ECONOMISTA

La factura de rescatar el plan a los 10 años

PAULA SATRÚSTEGUI

El Economista publica un artículo sobre el real decreto que aprobó hace unas semanas el Consejo de Ministros, por el cual se permite rescatar, a partir del año 2025, las aportaciones realizadas a los planes de pensiones que tengan más de 10 años de antigüedad.

Paula Satrústegui, directora de asesoramiento patrimonial de Abante, explica al diario una de las consecuencias de esta nueva medida: “En la mayoría de los casos, si rescatas el dinero antes de jubilarte vas a tener que pagar más impuestos porque la pensión siempre es inferior al salario ya que hay que sumar lo que rescatas a tu renta del trabajo“.

Para comprende por qué fiscalmente esta medida puede ser peor, Satrústegui expuso al periódico un caso práctico de un inversor de 43 años que tiene un sueldo de 30.000 euros brutos y que en 2015 tenía acumulados 10.000 euros en su plan de pensiones y que desde entonces ha seguido aportando 3.000 euros anuales a ese plan pensiones: “Si ese inversor rescata esos 10.000 euros de golpe en 2025 pagará un 30%, por lo que ingresará 6.997 euros de esos 10.000 que rescata; mientras que si espera a la jubilación pagará por cada euro un 28% e ingresará 7.154 euros”. Es decir, se ahorra 157 euros, pero esta diferencia puede ir a a más a medida que el salario es mayor, ya que si el rescate lo hace alguien que cobre 60.000 euros tributará a un tipo del 45% mientras que si se espera a rescatarlo una vez cobre ya la pensión de jubilación y estimando que ésta sea la máxima permitida, se sumará el rescate a los 36.031,80 que como mucho se pueden cobrar en España como pensión pública, lo que reduce mucho el tipo que se aplicaría y por tanto los impuestos a pagar.

Aquí podéis leer el artículo completo en El Economista.