Visión de mercados | Septiembre 2025

Agosto mantuvo el tono positivo en los mercados: las bolsas alcanzaron máximos históricos gracias a unos beneficios empresariales mejores de lo esperado y a datos económicos sólidos, salvo por las revisiones a la baja en el empleo. En cuanto a la temporada de resultados, en Estados Unidos han crecido los beneficios alrededor de un 11% en el segundo trimestre, y un 80% de compañías han batido las expectativas. Este avance ha estado liderado por las empresas tecnologías y de finanzas. En renta fija, el discurso de Jerome Powell en Jackson Hole apuntó a posibles recortes de tipos a partir de septiembre, lo que el mercado ya descuenta. El euro se fortaleció frente al dólar y, en el plano geopolítico, se redujeron las tensiones comerciales, favoreciendo un entorno más estable para el comercio y la inversión.
En renta variable, el índice mundial se anotó una subida del 1,95% en moneda local y del 0,22% en euros, debido a la depreciación del dólar en agosto. Los índices estadounidenses también cerraron en positivo, aunque, al traer las rentabilidades a euros, el resultado fue negativo: el S&P 500 perdió un 0,52% y el Nasdaq, un 0,84%. El Dow Jones cerró el mes con una rentabilidad positiva a pesar del efecto divisa, con una rentabilidad del 0,74% en euros. Europa se mantuvo con ligeras subidas en agosto. El MSCI Europe cerró con ganancias del 0,96% y el Euro Stoxx 50 con una rentabilidad positiva del 0,60%, ambas medidas en euros. Destacamos el buen comportamiento del Ibex 35, con una subida del 3,74%.
A nivel sectorial, agosto ha sido un mes positivo para la gran mayoría de los segmentos. Destacaron el sector de materias primas y salud, con subidas del 4,41% y 2,51%, respectivamente. Por su parte, telecomunicaciones subió un 1,65% y consumo discrecional, un 1,58%, mientras que financiero y energía se anotaron un 1,08% y 1,05%, respectivamente. El sector de consumo básico tuvo un comportamiento plano, con ligeras subidas de un 0,13% en euros. Mientras tanto, los sectores de utilities, tecnología e industriales registraron caídas del 3,20%, 2,01% y 1,92%, respectivamente.
En agosto, la renta fija mostró un comportamiento dispar entre Estados Unidos y Europa. Al otro lado del Atlántico el mercado aumentó las expectativas de recortes de tipos ante las señales de desaceleración económica, especialmente por una creación de empleo más débil de lo previsto. La Reserva Federal parece estar cambiando el foco, dando mayor prioridad al mercado laboral frente a la inflación, a pesar del leve repunte de esta en los últimos meses. En Europa, por el contrario, la curva de tipos repuntó ligeramente, impulsada por unas perspectivas de crecimiento más favorables, y apoyadas en un posible aumento del gasto fiscal. No obstante, los tramos cortos permanecieron anclados en torno al 2%.
La TIR del bono estadounidense a 10 años cayó del 4,37% al 4,23%, y cerró el mes con una rentabilidad del 1,67% en moneda local. La TIR del bund alemán a 10 años volvió a subir en julio del 2,70% al 2,72%, perdiendo un 0,10% en euros.
En deuda corporativa, los diferenciales en ambas regiones se ampliaron, a excepción de la deuda corporativa de baja calidad en Estados Unidos, que avanzó un 1,20% en el mes. Todos los activos de crédito cerraron agosto con rentabilidades positivas. La deuda corporativa de baja calidad avanzó en Europa un 0,26%. Los índices de crédito de alta calidad, que tienen un componente mayor de duración cerraron el mes con Estados Unidos subiendo un 1,01% y con Europa anotándose un 0,02%, en moneda local, respectivamente.
En cuanto a los datos macro, la inflación general en la zona euro subió al 2,1%, mientras la subyacente se mantuvo en el 2,3%. En España, el dato general se quedó en el 2,7%. En Estados Unidos, el último dato de julio se mantuvo también en el 2,7%, mientras que la subyacente subió hasta el 2,9%.
En cuanto a las materias primas, el oro volvió a máximos al subir un 5,89%. Así, cerró agosto en 3.487,20 dólares por onza. Por otro lado, el petróleo (Brent), cayó un 6,08%, terminando el mes en 68,12 dólares por barril. Respecto a las divisas, el euro/dólar se depreció un 2,32% en julio y cerró el mes en 1,1686. El euro/libra también cayó un 0,19% y el euro/yen se apreció un 0,15%.