La procrastinación del ahorro
Rafael Romero, director de Abante en Málaga, escribe una tribuna en Diario Sur titulada “La procrastinación del ahorro” en la que hace referencia a la definición que hacía el psicólogo Tim Pychyl de la procrastinación: una voluntaria e innecesaria dilación de tareas y responsabilidades que sabemos que debemos llevar a cabo y cuya dilación puede perjudicarnos.
Así, Romero señala que retrasar las tareas de forma voluntaria “dificulta la consecución de objetivos, incrementa nuestros sentimientos negativos e, incluso, puede perjudicar nuestra salud”, y añade que, a pesar de ser conscientes de que evadir algo que deberíamos hacer nos hace sentir mal, tendemos a dudar y a posponer y “acabamos priorizando las necesidades de corto plazo frente a las de largo plazo“.
El director de Abante en Málaga recuerda que esto no solo ocurre con las tareas diarias, sino que, con nuestro patrimonio el desenlace es el mismo: “La tarea de planificar nuestro futuro abordando estrategias de ahorro e inversión en un ciclo alcista de los precios y con los tipos de interés nulos no es tarea fácil, pero debemos ser conscientes de que el paso del tiempo reduce nuestras posibilidades futuras”.
Por todo ello, Romero subraya la importancia de “ocuparse antes de preocuparse” y de entender el ahorro acumulado como un medio para alcanzar nuestros proyectos, y no como un fin.