Espelosín: “Hacer una valoración de la bolsa con los tipos a cero no tiene sentido”

Cuando se cumple una década del estallido de la crisis financiera, algunos expertos están hablando de la llegada de una nueva burbuja, pero ¿sabemos realmente cómo se detectan? La clave para Alberto Espelosín, gestor de Abante Pangea, es diferenciar entre burbuja, sobrevaloración y cambio de paradigma.

El gestor explicó la importancia que juegan la subjetividad y el factor personal a la hora de discernir si un activo está caro o no. Así, Espelosín recordó que se habla de burbuja cuando el precio de un activo difiere de su valor fundamental, un valor que depende de las expectativas que se tengan sobre el crecimiento de beneficios de esa compañía. “Todo se debe a factores psicológicos. Existe una inmensidad de modelos de valoración y en todos ellos entra el elemento subjetivo”, señaló Espelosín durante el Desayuno de Actualidad celebrado en el auditorio Abante el 12 de julio.

Históricamente, el PER (Price to earning ratio o la relación entre el precio y beneficio en una empresa, es decir, el número de veces que estamos dispuestos a pagar por el beneficio de una compañía) era un indicador objetivo para calcular el precio de una acción. Ahora, con los tipos a cero, “hacer una valoración de la bolsa con los tipos a cero carece de sentido, porque se podrían justificar diferentes niveles para cada activo”, ya que se ha perdido esa referencia del activo libre de riesgo.

En este contexto, Espelosín remarcó la importancia de ser conscientes del nuevo paradigma en el que nos encontramos, con nuevos participantes en el mercado que son distintos a los de antes. “Han vivido diferentes situaciones de crisis, por lo que el perfil de riesgo es distinto“, remarcó.

Para el gestor, desde un punto de vista matemático, hoy en día solo podría haber una burbuja que “podría ser la de los bonos cero o tipos de interés negativos”. Además, mirando hacia el Nasdaq, Espelosín sí cree que existe una burbuja y habla de valores como Tesla o Netflix, cuyos precios de cotización descuentan unas expectativas inmensas.

Con todo, para Espelosín, la gran pregunta que tenemos que hacernos es si el tipo de interés al cero por ciento es una burbuja hecha por los bancos centrales que en el algún momento se puede pinchar, o si es un nuevo paradigma que vamos a tener de forma sistemática a largo plazo, y que en el fondo a todos nos conviene mantener.